MANUAL DE MONITORES
 

1.- IMPORTANCIA DEL MONITOR.

 

El servicio que un monitor realiza en la celebración es muy antiguo, aunque el nombre sea actual. El monitor guía con sencillez al pueblo en la celebración.

 

 

Tres clases de intervención de un monitor.

*.- INDICATIVAS: Señala las posturas corporales, el modo de realizar una procesión.

*.- EXHORTATIVAS: Desde qué actitud espiritual podemos cantar un salmo responsorial.

*.- EXPLICATIVAS: Ambientar una lectura desde su contexto histórico.

 

Las monisiones la puede realizar un laico preparado.

El monitor ha de iniciar con palabras breves, humanas y espirituales en donde trata de motivar la celebración que comienza, conectarla con la vida, con la fiesta, o las circunstancias específicas del día.

 

 

2.- OBSERVACIONES IMPORTANTES.

La monición no se trata de un homilía adelantada, crear la conciencia de que todos formamos una comunidad celebrante y que se prepara para lo que va a ser en común.

 

 

3.- MONICIONES ANTES DE LAS LECTURAS.

Antes de las lecturas caben varios modos de realizar las moniciones.

*.- Se puede hacer una en conjunto, si hay unidad entre sí; como en las grandes fiestas o una a cada lectura.

*.- No debe ser una homilía anticipada o un resumen de la lectura misma.

*.- No se trata de adelantar el contenido, sino de preparar la escucha despertar el interés.

*.- A veces es útil presentar el contexto histórico de una lectura, de una época, de un profeta o una circunstancia.

 

 

4.- PARA QUE SIRVE EL MONITOR.

Debe coordinar de acuerdo con el presidente los varios momentos de una celebración.

De él depende la belleza, la sencillez y el orden de la celebración.

Lleva el ritmo de la celebración, no se adelante ni se retrase.

Su servicio a la comunidad requiere un lugar adecuado, visible, delante de todos, no voz anónima, sin subirse al ambón, el ambón es el lugar reservado para el anuncio de la palabra.

Que sea un lugar no tan destacado como el ambón o la cede del presidente.

La presencia del monitor ayuda a la comunidad a captar dónde está en cada momento de la celebración.

 

*.- Se requiere que esté atento a la celebración y no esté distrayendo a la comunidad, buscando hojas de cantos o moniciones.

 

 

Lo más importante de su trabajo lo hace antes de la celebración.

*.- Póngase de acuerdo con el presidente antes de la celebración sobre todo lo que se tiene preparado, llevar en orden todo el material.

*.- Reparta con tiempo las lecturas y el salmo para que se preparen los lectores.

*.- El monitor debe tener una buena formación litúrgica.

*.- Un monitor no puede dirigir una celebración si no conoce su estructura.

*.- Debe estar bien preparado y presentado ya que esta a la vista de la asamblea.

*.- Debe recibir de buen modo los comentarios que le hagan después de su participación.

*.- No debe desanimarse por las críticas.

 

5.- CUALIDADES DE UNA BUENA MONICION.

BREVES: Llevar bien preparados sus comentarios, con una sobriedad que los haga asimilables.

 

CLARAS: Que las palabras sean eficaces, pensadas de antemano, evitando las exageraciones y que digan solamente lo necesario.

 

DISCRETAS. No hace falta que se hagan todas las posibles, sino las que parezcan más convenientes y que no siempre sean las mismas.

 

PEDAGOGICAS: Deben producir el efecto deseado, despertar el interés y suscitar un diálogo interior con Dios.

 

PREPARADAS: Normalmente por escrito y en coordinación con el presidente.

 

UNIDAD: Es conveniente que las diga la misma persona, para dar una unidad al conjunto de la celebración.

 

ADECUADAS: Las moniciones que ofrecen las hojas pastorales o los libros las tiene que considerar el monitor y no como un material que tiene que utilizarse a la fuerza.

 

APOYO: La monición no esta llamada a utilizarse siempre.

*.- La monición no es un elemento constitutivo de la celebración, sino un subsidio a la misma.

*.- La monición debe hacerse únicamente si lo exige o por lo menos lo aconseja.

 

APROVADAS: Que la monición tenga su aprovación del que preside dándoles un carácter de oficialidad y eclesialidad.

 

ORIENTADORAS: Las moniciones deben servir para ubicar el texto que se va a leer.

FIELES AL TEXTO: Cada pasaje tiene su propio tono y cada gesto ritual su finalidad.

 

SENCULLAS: Evitar que la monición invada excesivamente el ambiente celebrativo y convierta la monición en nuesva homilía.

 

OPORTUNAS: El monitor debe saber dar los adecuados silencios para una mejor asimilación de la palabra.

 

BIEN DICHAS: Las moniciones puieden leerse o desirse de memoria.

 

PUNTUALES: Las moniciones deben estar a tiempo a si como el monitor.

 

*.- El monitor no tiene que leer las lecturar ni viseversa.

 

N.B.- Hay que distinguir lo que es palabra nuestra y lo que es palabra de Dios.